5 de junio de 2008

La danza

Me gusta la danza: verla y practicarla (ojo, nadie crea que soy bailarina, ya me gustaría) es belleza pura.

Aunque mi cumpleaños fue en febrero, mi Toñita me dio mi regalo el pasado martes (muchísimas gracias). Me llevó a ver la versión de Carmen que hizo Antonio Gades. Sólo hay baile y música (cante flamenco y algunas piezas de la ópera de Bizet). La escenografía es minimalista, escenario negro y juegos de luces, y unas sillas y mesas que lo mismo hacían de cama que de escaleras. El espectáculo es maravilloso, muy ágil, muy expresivo, ni un momento para dejar de prestarle atención. Es muy grande conseguir decir tanto con tan pocos elementos.

Lo que os diga me gusta la danza. Qué de sensaciones transmite.

Por supuesto salí del Maestranza pensando que quiero aprender a bailar flamenco (una de mis grandes asignaturas pendientes, y hacer mi tesis algún día, y retomar el inglés y el francés, y cambiar de trabajo... mejor ni lo pienso)

Al día sigueinte, ayer, la danza volvió a emocionarme. Estuve en mis clases de danza del vientre (he de reconocer que soy así de pachanguera bailo salsa, chachachá...y ahora estoy entusiasmada con la danza oriental: lo dije antes, bailarina frustrada) Es una disciplina bastante complicada, aunque a priori se vea sencilla; la postura corporal, el control del vientre y la cadera, el manejo del velo...demasiado para alguien tan Pepe Viyuela como yo.

A lo que iba, el caso es que la profesora bailó a modo de demostración una coreografía, que la muy cachonda pretende que aprendamos. Y fue tan hermoso verla, la suavidad de los movimientos, el juego de las telas de colores, las manos... todo muy bonito, todo muy mítico. La pena era el espacio que no acompañaba.

La danza volvió a transmitirme. La danza es magia.

He de decir que después, cuando me vi a mi misma en chandal, intentando hacer lo que Nure había bailado minutos antes, me dio mucha risa, la magia dejó de serlo para trasnformarse en un gag de comedia española.

1 comentario:

Patri dijo...

nena la danza es preciosa, a mi me chifla tb desde niña. Creo q me gusta todo lo q se pueda expresar artisticamente, danza, musica, pintura, cine...
yo estuve el sábado en una actuación de ballet flamenco. La pena q fue en el salón de plenos de mi ayuntamiento y claro el escenario no acompañaba. Pero consiguieron emocionarme, no fue algo tan profesional como el q tu viste, pero jo..., entre la música, y el baile, tenía un nudo en la garganta q no veas, y la lágrima a punto de asomar. Y ya no te digo cuando terminó q pusieron una de mis sevillanas favoritas, q me trae tantos recuerdos de mi niñez..., q no podía ni cantarla del nudo q tenía, yo tratando de contener el llanto pero deseaba romper a llorar. A parte me recordaron a mi hermanilla, que desde q tenía 2,5 años ha estado en un grupo de baile q hacían de todo, y a mi ver bailar a mi hermana si q me emociona niña...la pena q lo han tenido q dejar, ya estan en la universidad y claro al hacerse cargo ellas del grupo hace 3-4 años..., pues no han podido continuar, cada una está por una zona, la mía en Salamanca...
pues eso q entiendo esa emoción q te invade niña. besitos